Gracias a los cariñosos, por vuestro apoyo y abrazos.
Gracias a los escépticos, porque ellos nos ayudarán a aterrizar las ideas
Gracias a los coherentes, porque sin ellos no tendría nada sentido
Gracias a los apasionados, porque ellos encienden la llama
Gracias a los que estáis siempre listos, porque siempre estáis ahí
Gracias a los soñadores, porque miran más allá
Gracias a los que estáis educando en los grupos, porque no olvidáis nunca el objetivo principal: lo importante de todo esto son los chavales, las experiencias y los valores que les estamos transmitiendo.
Y gracias a Dios. Que su fuerza, Amor, entusiasmo y alegría nos acompañen siempre.